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Las energías femeninas de la oscuridad y la Crone*

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Darkness and the Crone

* “Crone” es la palabra inglesa para designar a una mujer muy vieja y mágica: una Anciana Bruja. Como no existe una traducción precisa, preferimos utilizar la palabra original.

Podemos encontrar las energías femeninas de la oscuridad un poco confusas, porque hay una diferencia entre las energías de oscuridad “dinámicas” y las energías de oscuridad “receptivas” que encarnamos en nuestros ciclos menstruales y dentro de nuestras vidas. Podemos notar que la retirada y la oscuridad interna que van creciendo en la fase premenstrual – o “Hechicera” – de nuestro ciclo son diferentes a las energías quietas, silenciosas y ocultas de la Luna Oscura y de la fase menstrual – o “Crone”. También podemos notar que en el ciclo lunar, la creciente oscuridad de la luna menguante es diferente a las energías ocultas y quietas de la Luna Oscura.

También podemos experimentar estos diferentes tipos de oscuridad femenina en las etapas de nuestra vida, a medida que envejecemos y pasamos de ser una Mujer Cíclica a los dominios de una mujer postmenopáusica (post-“Sofía”).

No hay sólo una forma de oscuridad sino dos, tal como hay dos fases de luz:

  1. Una etapa de cambio – de aumentos y disminuciones.
  2. Una etapa de completitud, tranquilidad y quietud.

A medida que avanzamos a través de la fase premenstrual, bailamos una senda de cambio desde las energías completas de luz de la ovulación, a las energías completas de oscuridad de la menstruación. Nuestras energías físicas, mentales y emocionales disminuyen con la luz, pero nuestra intuición, conciencia espiritual, magia personal y energías creativas aumentan con la oscuridad.

Pero este camino hacia la oscuridad no es fácil: experimentamos picos y asperezas en las energías. Los picos nos permiten llevar la intuición y la magia ocultas en nuestro subconsciente a la vida cotidiana, para crear y cambiarnos a nosotras mismas y al mundo. ¡El arquetipo de oscuridad creciente de la Hechicera quiere ser salvaje y libre! Ella desea explorar y expresar su verdadero ser y las energías que siente. Es la Bailarina dinámica, girando entre la luz y la oscuridad, y el mundo interior y el exterior.

Pero gradualmente la oscuridad aumenta, de modo que se vuelve más poderosa que la luz del mundo exterior, y nuestro mundo espiritual interno se vuelve más importante. En nuestra fase menstrual, la Bailarina se detiene y se convierte en la Crone: oscuridad receptiva. Se fue la luz, y ahora ella está completa en su oscuridad. Permanece quieta, sin convertirse en nada y sin dejar nada. Está completa en sí misma, y en esa completitud acepta el mundo tal como es. Ella perdona y olvida porque no hay ego, no hay motivación, no hay impulso o necesidad de cambiar: sólo existe la tranquila unidad del alma del Universo. Este es nuestro viaje de todos los meses, el fluir de la oscuridad dinámica a la oscuridad receptiva.

También reflejamos este camino de oscuridad dinámica y receptiva en las etapas de nuestra vida. A los 40, cuando nuestro cuerpo comienza a cambiar, damos los primeros pasos en el camino de la Hechicera. Al comienzo somos principalmente energía luminosa y nos enfocamos en el mundo exterior, pero a medida que avanzamos en nuestro viaje, nuestro mundo interior (el mundo espiritual) y la oscuridad comienzan a crecer. Nuestra última sangre (nuestra “Sofía”) es el punto intermedio entre luz y oscuridad, y luego nuestro camino es uno reinado por oscuridad creciente sobre luz.

No hay una edad establecida para entrar en la etapa de oscuridad receptiva de la vida – la etapa de la Crone – ya que tanto nuestra experiencia de vida, nuestra salud física y nuestros intentos de luchar contra el flujo del ciclo de la vida pueden influir en el proceso. Sin embargo, finalmente la lucha cesa, el impulso se detiene y no vemos el mundo externo sino el interior.

La Crone es la Vieja que se sienta junto al fuego, que no está interesada en el mundo exterior y que, como nuestro yo más joven durante la menstruación, tiene un pequeño mundo exterior, pero un mundo interior infinito. La Crone es el alma del Universo, su cuerpo puede estar viejo y torcido, pero la luz del alma brilla a través de ella.

No somos Crone hasta que no somos oscuridad receptiva.

Mi madre tiene 91 años. Ella es Crone.

 

Para escuchar la voz de la Crone, quizá quieras leer los mensajes de Crone en Mensajes Espirituales para Mujeres, o explorar sus energías en los libros Luna Roja y El Despertar de la Energía Femenina.

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Translated by: Malena Pinto Schröder

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